ENSAYO 10: MUJERES CORTESANAS

= De Santas a Putas y de Putas a Santas =


Mensajero: - Una negra noche clara y fresca mientras las nubes sigilosamente cerraron el espacio y la luz de sus estrellas para dar comienzo al torrencial de una tormenta, se escucho desde las profundidades del aire el estruendo de un relámpago y del interior de un carro cerca un alarido grito de susto femenil que después echo ha reír.

Unas mujeres de hermoso parecer ingresaban a las callejuelas del pueblo entre un aneblado camino con incesante lluvia sobre el asfalto. Su joven conductor, las paseaba por las calles del centro antiguo adoquinadas de cantera y adornadas por palmeras sobre las aceras hasta el momento en que ceso la lluvia y Xiomara una de las mujeres mas sensibles del bar le confeso estar impresionada por su manera de hacerla sentir cómoda y confortable, digna del trato de un caballero, esperando a que llevara a las demás a casa para invitarlo a charlar a un café, y quizás luego a bailar a un lugar bonito.

Atraídas muchas mujeres por esa actitud, en preciosos vestidos floreados y fragancias provocativas le insinuaban sentirse encantadas por el hombre que lograba ver a la mujer detrás de la ilusión, intentando encender sus instintos básicos en brazas incandescentes de pasión que luego satisfacerían en sus besos y caricias. Aún así y pese a la pureza del ritual de esa seducción, el joven conductor conseguía detenerse con el gesto común de quien agradece ser amado, revelándoles mantenerse fiel a su corazón. Algunas tiernamente se sonrojaban por su arranque impetuoso, y se echaban a llorar por la respuesta del que las miraba a ellas, pero enseguida comprendiendo, le sonreían…

A Xiomara de especial belleza radiante y gracia sin igual, le dio la misma respuesta que a tantas a su cortejo experto tras un tango sobre la pista del “Salón de Ninfas”, ofreciéndole su compañía casta cada vez que la necesitara o quisiera en tanto estuviera de paso por ese lugar.

Trotamundos: - Pronto estarás en casa.

Amigo: - Sí.

Mensajero: - Años más tarde, descansando de una jornada de trabajo y bebiendo una cerveza sin alcohol evocaba esos días vividos al lado de cada una de aquellas mujeres conocidas por muchos a veces como unas putas y otras como unas santas.

(Se sientan sobre unas tumbonas en la entrada del portón del granero rodeado por los rollos de paja dejados en el campo a través de la cosecha de mies de trigo a principios de otoño, y del ronroneo ronco de unos gatitos de la coqueta, devota y comodina mascota de Esteta.)

Amigo: - (Imperturbable). Encontrar la dignidad de la mujer aún en los oficios mas despreciados por el convencionalismo social es admirable, ¿pero a ti porque te interesaron ellas, y lo que hacían o dejaban de hacer?

Trotamundos: - (Relajándose). Quería entenderlas desde el corazón. Me parecían las amantes incondicionales del hombre. Mujeres que cobraban muy poco en realidad por tan preciado servicio. Aunque te he de confesar mi interés principal aún mas que su servicio, era la mujer detrás de la vocación. La mujer que encontraba sentido y finalidad en su vida al hacerse puta.

Pasaba por mi mente, quienes eran aquellas mujeres capaces de desarrollar la posibilidad de valorar y elegir tan cometido propósito. Quería explicarme sin prejuicios como vivían sus vidas, como satisfacían sus necesidades, como se descubrían día a día, cual era el significado de sus experiencias y su actitud ante ellas. Si les importaba la mirada juiciosa de la gente que permanecía solicitándolas. Me importaba en fin, saber si fue su espíritu libre la que las construyo.

Amigo: - ¿Y trabajar como su conductor, fue lo que hiciste para saberlo?

Trotamundos: - Sí, gran parte de mi aventura estuve viviendo entre ellas como el conductor que las llevaba y traía de trabajo a casa. En esos viajes en el carro era cuando existía la oportunidad de comenzar a resolver mis preguntas, y de escuchar con atención y respeto la historia individual de cada una.

Al escucharlas, atendía mi curiosidad y conseguía conocerlas.

Me tomo tiempo aprender ha ver entre ellas caminar a mujeres de diferente disfraz, pero poco a poco desarrolle consciencia de lo bueno y lo verdadero de cada una dedicada a esta tarea, dando con su dignidad, en la que el sentido potencial de su vida podía encontrarse aún con mayor valor y respeto que la de cualquier otra mujer dedicada a un oficio o profesión diferente.

Amigo: - Diste con disfraces diferentes al pasar de los años. Esa es una verdad obvia pero inconspicua, ¿cómo explicarías esas diferencias?

Trotamundos: - Tomando la actitud correcta al escucharlas, y apartando aquellas mujeres autenticas, las hechas y derechas unas putas o santas desde donde se quiera verlas. Se puede comprender otros dos modos de vida en las mujeres entre sus infinitos disfraces posibles. Estos modos son: Las putas reprimidas que fingen ser santas, y las santas reprimidas que fingen ser putas.

La primera es una mujer de moral preconvencional, que se ha conformado a la sociedad sin establecer un criterio individual de valores y oportunidades para satisfacer sus necesidades de acuerdo a un camino que le permita crecer y desarrollarse en una vocación en la que se sienta llamada. La segunda en cambio es una mujer de moral posconvencional, que por la consciencia de sus circunstancias en la sociedad, siente la necesidad y la preferencia de fingir ser puta por algo o alguien que valora más allá de su vida misma, la que apartada para uno, por amor ha decidido vivir para varios.

Amigo: - Por tu experiencia especialmente entre putas, me gustaría me hablaras sobre como viven la autentica y la santa reprimida. Por que es como si el acto social de reprimir y el acto individual de fingir se confabularan como explicación para la santa reprimida, en tanto la elección sincera en el acto individual fuera la única explicación para la autentica.

Trotamundos: - Sí, en tanto la autentica se realiza y preferentemente le resulta innecesaria la trascendencia en su vocación. La santa reprimida, únicamente se trasciende pues su razón en la vida es otra.

Si bien es cierto que muchas mujeres son putas por una actitud mercantil y cobarde en la que se relacionan sexualmente con hombres a cambio de dinero ó de evitar el dolor ante la vida (Aquí el encanto sin corazón es peligroso para la vida), en las mujeres de realización auténtica y las mujeres trascendentales es de lo más honorable y admirable: una por vivir lo que hace, y otra por hacerlo por quien vive; una por la elección que le permite satisfacer su necesidad impulsiva de sexo por sexo, y otra por la elección que le permite proyectarse en algo ó en alguien más allá de si misma.

Ahora lo que se debe comprender es que para la puta autentica la vocación es el fin de su deseo sexual, y para la puta trascendental la vocación es el medio por el que expresa su amor a otro. Muchos hombres solitarios agradecen a la puta que llega a reconocerlos tanto como el medio del fin sexual, como el fin del medio del amor: es decir a la mujer de realización autentica que además logra vivir su trascendencia en ellos como respuesta significativa a la vida.

Por eso estoy en desacuerdo con los que hablan de la puta como solamente presencia, que desaparece más allá del momento en que se está con ella, como si ningún ser la pensara y en ningún ser se proyectara, como quién siendo solamente presencia en el encuentro, fuera nadie, nada. Es tonto estar de acuerdo con ellos, pues ellas han sido la respuesta de la humanidad durante milenios tanto como fines y medios.

Amigo: - ¿Quieres decir que la puta puede ser buscada tanto por el impulso sexual como por el atractivo amoroso, y que en algunas de ellas se descubren ambos?

Trotamundos: - La puta como cualquier mujer u hombre, es objeto y sujeto en el acto sexual. Cuando son objeto, el sexo es el fin. Cuando son alguien, el sexo es el medio. Cuando son el fin, son alguien. Cuando son el medio, nadie, nada, desapareen más allá del momento.

Amigo: - Ahora con esto que me has hablado, el tema específicamente de las putas de autenticidad-trascendental me resulta todavía mas interesante que el de las autenticas y trascendentales por separado. ¿Quieres explicarme qué es lo qué buscan estas mujeres en la relación sexual con los hombres?

Trotamundos: - Estas mujeres son las que además de disfrutar el placer de cambiar sexo por sexo, aman al hombre. Son mujeres conscientes que por la grandeza de un instante, se mide a veces la grandeza de una vida. Por lo que buscan cumplir uno de los propósitos indispensables en la vida humana con su cuerpo, mente y espíritu; permitir al hombre aunque fantásticamente por un momento, lograr expresarse, sentirse seguro, y reconocido en ese lugar y en ese momento.

Atraídas por el hombre, satisfacen con él los impulsos naturales de sexo, abriéndose mutuamente la posibilidad de realizarse. Sin buscar ser la simple cosificación para un fin sexual, son el medio para que el hombre se encuentre a si mismo, como un ser en potencia, capaz de amar y sentirse amado, y de comprometerse con cada mujer del mundo. Ya que al lograr amar a una sola mujer, estarán amando a todas las mujeres de este mundo.

Amigo: - Al amar a una mujer estarán amando a todas ellas, ¿no es eso promover la poligamia y el engaño?

Trotamundos: - Por supuesto el amor implica conocerlas, cuidarlas, y ayudarlas a crecer. Además respeto, y el respeto a veces monogamia. Valores muy individuales y que pueden compartirse. Sin embargo entendiendo que el amor es un valor universal, la puta de autenticidad-trascendental diría: “Cuando expresas tu amor sexual al hombre, la santa comienza a coger contigo; pues un hombre que ha recibido amor de una mujer, tendera ha confiar en regresarles el mismo gesto a todas las demás…

Caminando con ellas alcance a quienes se dedican mas allá del puterío fatuo, a las putas de autenticidad-trascendental que continuamente tienen que hacer de amigas: escuchando atentamente, intercambiando opiniones, aceptando incondicionalmente, ayudándoles a aliviar sus dolores emocionales, participando en sus fantasías puritanas, riendo con ellos, y hasta veces sirviendo también de respuesta al problema de su existencia, al unirse en ese punto más allá de la carne y el encuentro esporádico, al fusionarse en un amor autentico e imperecedero.

Amigo: - Punto en el que la puta deja de expresarse como puta y se vuelve una santa. ¡Prodigioso! ¡En verdad asombroso Hermano! Una mujer que aparte de mujer, termina siendo amiga, terapeuta, condescendiente y respuesta pulcra ante la vida.

Trotamundos: - Los hombres sabemos, que la vocación de puta no es tan necesaria para toda mujer que la práctica como para el que la necesita y la busca. En el acto sexual, insisto, la santa reprimida y a veces la autentica: se trasciende, se entrega, sacrifica, muestra su capacidad de abandonarse a si misma por amor a alguien, a algo, a los suyos, al hombre al que se une…

Mientras tanto este impulsado por la necesidad, se descubre a si mismo como alguien capaz de poder expresarse mas allá de algo, en alguien; encontrando el como satisfacer el equilibrio interno de sus necesidades y el para que de su tensión inicial, de tal forma que lo que alguna vez fuera puro impulso, termina por atraerle: la mujer.

Amigo: - ¿Esa es la finalidad de la mujer detrás de la vocación de puta, salvar a los perdidos de la insatisfacción y del sin sentido del uso de sus capacidades?

Trotamundos: - Sí, para este equilibrio de las necesidades y tensión entre ser y sentido en el hombre, surgieron las putas a veces para satisfacer y otras tantas para orientar. Descubrir en una mujer placer y razón para sufrir la espera del anhelado encuentro, es un viaje que el digno emprende, de tal manera que de la adecuada interacción entre equilibrio y tensión significativa surgen paralelamente satisfacción y propósito.

Amigo: - Individualmente con tu relato sobre la vida de las mujeres en la vocación de puta, concluiría lo siguiente: “El yo de la mujer como del hombre, es solo yo en el tú; nadie existe, no se conoce, no se encuentra sino es en los otros; en ultima instancia ser es amar; estar a disponibilidad del otro y a las posibilidades de un camino en crecimiento y cambiante, a fin de lograr una meta con sentido; ser amante y amado

Trotamundos: - ¡Exacto! Vivir como virgen es una bendición si hay un para quien o para que. No obstante muchas putas son más dignas de la vida que aquellas vírgenes sin un significado trascendental. Se logra entender que la puta deja de ser impura cuando lo hace con mil por amor a ellos.

Muchas de estas mujeres son la solución al hombre en estado de insatisfacción y desamor. Por esa razón, sin prejuicios me atrevo ha afirmar que la mujer más santa de todos los tiempos seguramente fue una puta expresando su amor a los hombres mas solitarios.

Ciertamente, a quien se le perdona mucho, mucho a de haber amado.

(Terminan el tema, y se dirigen a un grifo dentro del granero para lavar sus rostros del sudor de la jornada, secándose con una toalla que cuelga sobre uno de los andamios de madera encina que ordenan los costales henchidos con trigo junto al lavabo.)

Mensajero: - El timbre de su celular sonó anunciando la entrada de una llamada. El primo Andrés que trabajaba a 40 km de allí con un equipo de 30 empleados en la construcción de un tramo carretero al siguiente pueblo en compañía de sus otros primos Raymundo y Salvador, quería pasarán a saludarlos antes de regresar a casa. Un par de minutos de conversación y acordó hacerlo, y además llevarles un par de cajas de cervezas heladas sin alcohol para saciar su sed.

Inmediatamente le hablaron a la niña que de rato jugaba con sus mascotas a mitad del granero para subirla con estas a uno de los asientos traseros de la camioneta, y al encenderla para ponerse en marcha, el amigo quiso cerciorarse de su afirmación para justificar a la puta de autenticidad-trascendental dentro de una comunidad social en la que los hombres la necesitarán. Mirándole entonces con tenacidad afable, le contesto que definitivamente lo hacía, pero lo que nunca justificaría en una mujer, es mantener relaciones sexuales con varios hombres si lo que pretende es concebir. Momento en el que por consideración al amor y linaje de cada uno, debería reservarse exclusivamente al elegido como padre del futuro bebe.

Decía que íntimamente concebía como una puta fatua, a toda aquella mujer que tenía relaciones sexuales con uno, dos ó más hombres por un interés no valorable a nivel trascendental; aquella que lo hacia a cambio de placer, dinero, seguridad, protección, prestigio oh posición egoísta. Igual concebía como una santa a toda aquella apartada para Dios, oh de manera análoga a la apartada por amor para un solo hombre, u hombres en una relación autentica y trascendental.
Reservados Todos los Derechos al Autor: Gustavo Alonso Briones Zavala.
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Estoy buscando editorial atrevida que quiera invertir recursos en la impresión del libro: un tiraje digno en tierra fértil...

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